Los cecílidos o cecilias

 

-DESCRIPCIÓN:
Los cecílidos o cecilias (Caecilia nigricans) son unos animales anfibios y ápodos de la familia Caeciliidae. Están caracterizados por tener un aspecto vermiforme, tentáculos olfativos, ausencia de extremidades, cintura pélvica y cintura escapular, con el cuerpo dividido en anillos. Poseen un cuerpo alargado compuesto por unas 200 vértebras y algunas especies presentan una cola corta. Su cabeza es aplanada y con muchos huesos. Tiene unos pequeños ojos rudimentarios, a veces atrofiados o cubiertos de piel. Esto parece indicar que la única función de sus ojos es percibir la luz. Su piel es lisa y la de la región del encéfalo es dura, esto es debido a que las capas más internas se encuentran fusionadas con el cráneo; esta característica les permite buscar y palpar con la cabeza, además de cavar con ella sin que la piel se desprenda. También poseen unos apéndices situados a los lados de la cabeza, entre la nariz y el ojo que les permiten detectar olores. La mandíbula está en la parte inferior de la cabeza, lo cual evita que le entre tierra mientras cava. Tiene unos pequeños dientes proyectados hacia atrás, lo que le facilita capturar presas.

-MEDIDAS Y PESO:

El tamaño de los cecílidos varía según la especie: desde 10 cm de la especie Idiocranium russeli hasta 1,5 m de la especie Caecilia thompsoni.

-ALIMENTACIÓN:

Los cecílidos son carnívoros, pero su alimentación varía según el tamaño de las especie: las especies más pequeñas se alimentan de ciempiés, insectos lombrices y gusanos, mientras que las especies más grandes se alimentan de ranas y serpientes.

-DISTRIBUCIÓN Y HÁBITAT:
Suelen vivir bajo el suelo, aunque también hay especies acuáticas. Se encuentran en América, África, La India e Indochina.

-REPRODUCCIÓN:

Su reproducción es ovípara u ovovivípara con fecundación externa. Los huevos carecen de membranas interiores.